La iniciativa tiene como objetivo proporcionar una fuente alternativa de abastecimiento de agua para la Región Metropolitana de Gran Vitória y para los municipios de Anchieta y Aracruz.
El Gobierno de Espírito Santo tiene la intención de implementar una planta desalinizadora con el objetivo de convertir el agua de mar en agua potable en Espírito Santo. El proyecto será ejecutado conjuntamente por la Secretaría de Desarrollo (Sedes) y la Empresa de Saneamiento de Espírito Santo (Cesan), dentro de la Cartera de Asociaciones Público-Privadas (APP) del Estado.
La iniciativa, validada por el Consejo de Administración del Programa de Parcerías para la Inversión (PPI), tiene como objetivo proporcionar una fuente alternativa de abastecimiento de agua para la Región Metropolitana de Gran Vitória y para los municipios de Anchieta y Aracruz.
«Nuestra expectativa es que podamos tener una planta en Espírito Santo con una capacidad de 1.100 litros convertidos de agua salada a agua dulce por segundo, con un volumen compatible para abastecer a una ciudad con más de 550 mil habitantes. Es decir, estamos invirtiendo en alternativas hídricas que permitan agua de calidad para el consumo humano y para abastecer a la industria, nuestra economía, que genera empleos y oportunidades. Más que preocupados, estamos trabajando para generar iniciativas», dijo el vicegobernador y secretario de Estado de Desarrollo de Espírito Santo, Ricardo Ferraço.
Se espera que el aviso del Procedimiento de Manifestación de Interés (PMI) se lance en el primer semestre de este año. El PMI es la convocatoria pública para que las empresas presenten un estudio de viabilidad y recopilación de datos sobre el proyecto en cuestión.
«La implementación de esta tecnología representa un hito histórico en el saneamiento de Espírito Santo. La planta desalinizadora es una medida que pone de manifiesto la anticipación del Gobierno del Estado a los retos que enfrentamos en relación con el suministro de agua, especialmente en momentos en que la seguridad hídrica se ha convertido en una preocupación creciente. La iniciativa aborda las necesidades inmediatas de suministro y está alineada con nuestra visión de sostenibilidad ambiental. A través de una operación eficiente y ecológicamente responsable, estamos minimizando la presión sobre las fuentes de agua», dijo el presidente de Cesan, Munir Abud.
En noviembre de 2023, Ricardo Ferraço y Munir Abud viajaron a Chile para conocer la exitosa experiencia de la planta desalinizadora que opera en el desierto de Atacama, que desarrolla el proceso utilizando agua del Océano Pacífico para abastecer a los hogares de la localidad.
Al mes siguiente, representantes de la empresa española GS Inima presentaron un documento de Manifestación de Interés Privado (MIP) ante Sedes para instalar plantas desalinizadoras en territorio de Espírito Santo. A partir de la publicación de la convocatoria del PMI, otras empresas interesadas tendrán la oportunidad de proponer estudios de viabilidad del proyecto.