- Luis Miguel Arauzo lideró una ponencia donde se mostraron los casos de éxito de Tedagua, que han supuesto un valor añadido tanto en la aplicación de mejoras tecnológicas, como en soluciones medioambientalmente sostenibles para proyectos de desalación de agua en las regiones donde se han realizado.
- Se analizó como hacer frente al reto de la escasez hídrica, la garantía de suministrar suficiente agua a una población creciente y la necesidad de la desalación como contribución necesaria a un desarrollo sostenible.
Tedagua ha estado presente en la tercera edición del MENA Desalination Projects Forum, además de tener la oportunidad de exponer su visión y experiencias de éxito en conseguir soluciones innovadoras y proyectos de desalación con un impacto sobresaliente en el nivel de vida de la población abastecida.
Este foro está considerado el más importante de la región, ya que constituye una plataforma única de comunicación entre los líderes del sector y los principales organismos públicos de los países árabes, donde se analiza el camino a seguir para la industria de la desalinización en la región, y las visiones de sostenibilidad impulsadas por las agendas del agua para el año 2030.
La tercera edición del foro se celebró en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos) entre los días 15 y 16 de marzo, y se centró en cómo hacer frente al reto de la escasez hídrica que sufren estas regiones, y la garantía de suministrar suficiente agua a una población creciente. Además, se exploraron las últimas soluciones que puedan permitir una desalación de agua sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
Tedagua quiso aportar su experiencia de 38 años en el mundo del agua participando activamente en el foro. Con ese fin, el director comercial, Luis Miguel Arauzo, lideró una ponencia donde se mostraron algunos casos de éxito con los que cuenta Tedagua, que han supuesto un valor añadido tanto en la aplicación de mejoras tecnológicas, como en sus beneficios sobre el medio ambiente y sobre la población atendida.
Entre los proyectos de éxito que suscitaron más interés, cabe destacar la reciente instalación de plantas portátiles en la isla de La Palma para hacer frente al problema hídrico que había generado la erupción del volcán Cumbre Vieja. El suministro y puesta en marcha, en tiempo record, de dos plantas capaces de suministrar conjuntamente 5.600 m3/día de agua desalada para riego, supuso principalmente la salvación de la industria platanera de la zona.
La planta desaladora de agua de mar para la mina Spence fue otra de las referencias destacadas durante la ponencia. Es una estación con una capacidad de producción de 86.400 m3/día junto un sistema de impulsión de 154 kms para llevar el agua desalada a la mina ubicada a una altura de 2.000 m de altitud en el norte de Chile, cuyo éxito está en que va a permitir duplicar la producción de la mina con un nuevo proceso de perforación, evitando utilizar otros reactivos químicos y reduciendo así la huella de carbono de esta industria.
Otros proyectos destacados en la ponencia fueron las plantas desaladoras de Beni Saf en Argelia, la de Tuas III en Singapur o la del proyecto Provisur en Perú, instalaciones todas ellas que han contribuido claramente al desarrollo de sus zonas de influencia de una forma sostenible.